NACH: nuevo trabajo “Los Viajes Inmóviles”
Después de dos décadas… y cientos de conciertos… Aún queda mucho por decir. Un nuevo viaje!
NACH | Moisés P. Sánchez | Antonio “Toño” Miguel | Michael Olivera | Tron Dosh
El mc alicantino, que en su nuevo trabajo se ha decantado por el Jazz, el Slam y la poesía, continua con su ingeniosa prosa.
Los viajes inmóviles:
Nach nos tiene acostumbrados a viajar por la ciudad a ritmo de rap. Sus seis álbumes musicales y su dilatada trayectoria profesional, de más de 15 años, le avalan. En esta ocasión, el viaje continúa… Pero ahora Nach nos propone un vehículo distinto y, aunque el decorado sigue siendo la ciudad, fuente de inspiración, regresa escuchando nuevas partes del alma, dejando hueco a la introspección, sin reglas preconcebidas ni rimas enjauladas en ritmos o esquemas determinados. Nach, con esta nueva entrega, nos demuestra su multidimensionalidad como artista y nos invita a compartir su viaje a través del Slam o, lo que es lo mismo, a través de la poesía oral interpretada.
Los viajes inmóviles supone un vuelo sin motor, con la palabra como impulsor de las emociones y con la música como catalizador de las sensaciones.
Un intenso viaje hacía ese, a veces, olvidado y maltratado interior pero que no requiere roce ni esfuerzo físico. Aquí cabe la existencia, el amor, la esperanza, telón de fondo. El peso compositivo de la música corre a cargo del pianista Moisés P. Sánchez acompañando así con una gran calidad y sensibilidad especial a todos los recitados de este disco.
Se trata de un trabajo que viene a demostrar, de nuevo, la polivalencia creativa de Nach, desmarcándose de cualquier etiqueta o tendencia cerrada y demostrando que, más de allá de tribus, de culturas y de modas, es un artista la poesía de formatos más clásicos. Porque en toda su amplitud y grandeza, Nach es un artista de la palabra.
VIDEO PROMOCIONAL “LOS VIAJES INMÓVILES en DIRECTO”
ENTREVISTA “Nach recurre al «slam» en su nuevo disco, ‘Los viajes inmóviles“
Nach::: Mc
La presencia y sonoridad de su majestuosa voz, su virtuosismo en la descarga, su emoción en la entrega, son un auténtico lujo. Estamos ante un Stradivarius del rap. Y ante un orador humanista, un cronista lírico que expone con valentía su sensibilidad, sin intentar ocultarla tras una actitud de miedosa dureza. Nach mantiene vigilia ante la frivolidad y materialismo que ha ido contaminando un movimiento que ponía palabra a la alienación de la calle. Lo que en un principio fue un necesario juego compensatorio para agrandar los egos pose que precisamente nutre lo que denunciaba. Nach lo confronta desde el dolor de ver como lo más amado es mal utilizado. Lo que hierve por las venas de este MC que honra los orígenes del rap es querer expandir la conciencia, liberar la emoción, incitar la conquista de la redención de cada cual, y nunca callar la voz ante la injusticia. En una generación apolítica es vigorizante escuchar a un cantautor que todavía cree en ideas y anhelos superiores. Sus canciones no
son aleatorios listados de rimas ocurrentes, son forjados trabajos de concepto y elipsis, de coherencia y solidez.